La leptospirosis (también conocida como enfermedad de Weil) es una enfermedad causada por bacterias (Leptospira interrogans) que produce una gran variedad de síntomas que pueden ocurrir en dos fases; algunos pacientes pueden desarrollar insuficiencia hepática o renal, respiratoria, meningitis o incluso la muerte.
La infección bacteriana se extiende a través de la orina de animales infectados de muchas especies, tanto domésticos (como perros y caballos) como animales salvajes infectados (como los roedores o cerdos salvajes). Se denomina como enfermedad zoonótica o enfermedad de zoonosis porque se da en animales salvajes. Las bacterias pueden sobrevivir en el agua y en la tierra durante meses. La enfermedad se da más en climas tropicales y templados. La infección de estas bacterias ocurre en todo el mundo (por ejemplo, en Estados Unidos, se ha encontrado la Leptospira en el agua y cascadas de Hawai).
¿Cuáles son los síntomas de la Leptospirosis?
Los signos y síntomas de la leptospirosis suelen aparecen de repente, de 5 a 14 días después de la infección, pero el periodo de incubación puede variar entre 2 y 30 días.
Los signos y síntomas de la leptospirosis leve son:
- Escalofríos.
- Tos.
- Diarrea.
- Dolores de cabeza que pueden empezar de repente.
- Fiebre alta.
- Dolor muscular, sobre todo en la parte baja de la espalda y pantorrillas.
- Nausea.
- Poco apetito.
- Ojos rojos e irritados.
- Dolor de piel.
Los signos y síntomas de la leptospirosis severa aparecerán unos días después de que los síntomas de la leptospirosis leve hayan desaparecido.
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Dependen de qué órganos vitales están afectados.
Si el corazón, el hígado o los riñones están afectados, la persona experimentará:
- Fatiga.
- Latidos irregulares y a veces rápidos.
- Dolores musculares.
- Nausea.
- Sangrados de nariz.
- Dolor en el pecho.
- Jadeos.
- Poco apetito.
- Manos, pies o tobillos hinchados.
- Pérdida de peso sin explicación.
- Ictericia, amarillamiento del blanco de los ojos, lengua y piel.
Sin tratamiento, esto puede llevar a una insuficiencia renal de por vida.
Si el cerebro se ve afectado, puede desarrollarse meningitis o encefalitis.
La meningitis es una infección de la capa externa del cerebro, mientras que la encefalitis es una infección del tejido cerebral. Ambas tienen signos y síntomas parecidos.
Signos de Meningitis o Encefalitis:
- Erupción cutánea, que no cambia de color o desaparece cuando se presiona un cristal contra ello.
- Confusión o desorientación.
- Somnolencia.
- Ataques o mareos.
- Fiebre alta.
- Nausea.
- Fotofobia o sensibilidad a la luz.
- Problemas con movimientos físicos.
- Rigidez de cuello.
- Imposibilidad de hablar.
- Vómitos.
- Comportamiento agresivo o inusual.
La meningitis o la encefalitis no tratada puede resultar en un daño del cerebro serio y puede ser mortal.
Si los pulmones se ven afectados, la persona no puede respirar. Esta es la complicación más seria y mortal de la leptospirosis.
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Los signos y síntomas incluyen:
- Fiebre alta.
- Jadeo.
- Tos con sangre.
En casos graves, puede haber tanta sangre que el paciente se ahoga.
¿Qué causa la Leptospirosis?
La causa de la leptospirosis son las bacterias (genus Leptospira y species interrogans), una espiroqueta Gram-negativa (bacteria en forma de espiral). Esta bacteria infecta a diferentes tipos de animales (animales salvajes, roedores, perros, gatos, cerdos, caballos, ganado, por ejemplo) que después contaminan el agua, lagos, ríos, tierras y cultivos al orinar ya que las bacterias se presentan en la orina. Las bacterias entonces infectan a los humanos cuando interrumpen la piel o las membranas mucosas o cuando las personas las ingieren. Las bacterias se multiplican en el hígado, riñones y el sistema nervioso central. El contagio de persona a persona de esta enfermedad es poco común.
¿Cuánto tiempo dura la Leptospirosis?
El paciente normalmente se recupera en una semana sin tratamiento, pero una pequeña proporción continuará en el desarrollo de una leptospirosis severa.
¿La leptospirosis es contagiosa? ¿Cuál es el periodo de contagio de la leptospirosis?
En general, la leptospirosis humana se considera débilmente contagiosa. Esto se debe a que, como otros animales, los humanos pueden mantener la leptospirosis en la orina durante y después de la enfermedad. Como consecuencia, los individuos expuestos a la orina de humanos infectados pueden infectarse. Por ejemplo, aunque las bacterias no están en el aire y tienen un riesgo muy bajo de que estén presentes en la saliva, las personas que traten con ropa de cama mojada o material con sangre de una persona infectada pueden aumentar la posibilidad de infectarse. Hay algunos casos de transmisión entre parejas sexuales, pero la incidencia de este tipo de contagio parece ser muy bajo. Desafortunadamente, madres embarazadas que tengan leptospirosis pueden infectar al feto.
El periodo de contagio de la leptospirosis depende del tiempo que se mantengan los organismos viables en la orina. La mayoría de personas mantendrán estos organismos a en la orina durante unas pocas semanas, pero hay casos en los que humanos pueden continuar transportando organismos de la orina hasta durante 11 meses. Algunos expertos sugieren que existe riesgo hasta 12 meses después de coger la infección inicial.
¿Cuál es el periodo de incubación de la Leptospirosis?
El periodo de incubación de la leptospirosis es de aproximadamente de 7 a 12 días, pero puede variar de 2 a 30 días.
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Factores de riesgo de la leptospirosis
Los factores de riesgo incluyen a personas que trabajan con animales de granja, salvajes y agua y suelos contaminados (granjeros, trabajadores de mataderos, veterinarios, mineros, personal militar, voluntarios y víctimas de desastres, por ejemplo). Las personas que participan en actividades de exterior, como campings o kayaks, también tienen un alto riesgo de infección. Cualquier exposición a aguas residuales o a desechos de animales, incluyendo heces de perros infectados, aumenta el riesgo de tener leptospirosis. Las lluvias torrenciales pueden hacer que la infección bacteriana aumente en una población donde suele haber inundaciones. Así lo demuestra cuatro muertes de leptospirosis debido a las inundaciones en Puerto Rico.
Tratamiento Médico de la Leptospirosis
Los médicos, pediatras y especialistas de emergencia suelen tratar la leptospirosis en países donde es endémico y los pacientes están en la primera fase de la enfermedad. Se suele consultar a otros especialistas si el paciente comienza a entrar en la segunda fase de la enfermedad. Estos especialistas pueden ser especialistas de cuidados intensivos, de enfermedades contagiosas, personal hospitalario, internos, neumólogos, cardiólogos, y especialistas del riñón.
¿Cómo diagnostican los médicos la leptospirosis?
Los médicos hacen un diagnostico presuntivo basado en el historial del paciente y en el examen físico. Solo los laboratorios especializados hacen pruebas de serología serológica para serogrupos leptospirosis (tipos específicos de bacterias que reaccionan a ciertos anticuerpos). Los profesionales sanitarios pueden realizar pruebas definitivas aislando la bacteria del paciente (sangre o CSF) o mediante una prueba de aglutinación microscópica positiva (MAT). Otras pruebas (ELISA; PCR; o tiras reactivas de orina) pueden proporcionar evidencia adicional de la infección. Los pacientes con síntomas graves deberían ser tratados ya que las pruebas tardan en confirmar los resultados.
¿Cuál es el tratamiento para leptospirosis?
Aunque existe controversia sobre el uso de antibióticos en la primera fase de la leptospirosis, se recomienda el uso de antibióticos (penicilina – penicilina G, ampicilina [Omnipen, Polycillin, Principen], amoxicilina [Amoxil, Trimox, Moxatag, Larotid], or erythromycin [E-Mycin, Eryc, Ery-Tab, PCE, Pediazole, Ilosone]) para el tratamiento de pacientes en fase dos o con síntomas graves. Algunos pacientes pueden necesitar antibióticos IV o cuidados hospitalarios como rehidratación.
¿Cuál es el pronóstico de la leptospirosis?
En general, el pronóstico de la leptospirosis es bueno. Muchas personas se infectan y se recuperan sin ningún tratamiento. Sin embargo, el pronóstico empeora cuando los síntomas aumentan. Personas con la enfermedad de Weil pueden tener un pronóstico que varía de bueno a malo, dependiendo de la respuesta al tratamiento. Las mujeres embarazadas e infectadas tienen una probabilidad alta de aborto, sobre todo si se contagian durante los primeros meses de embarazo.
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¿Hay una vacuna para leptospirosis? ¿Se puede prevenir?
El riesgo de obtener leptospirosis puede reducirse evitando nadar en aguas que puedan estar contaminadas con orina animal, o eliminar el contacto con animales potencialmente infectados.
Aquellas personas expuestas a aguas o suelos contaminados, por su trabajo o actividades recreacionales, deberían utilizar ropa y calzado protectores.
La vacuna de la leptospirosis no está disponible actualmente en los Estados Unidos. Sin embargo, los trabajadores en alto riesgo de algunos países de Europa y Asia pueden tener acceso a una vacuna. Desafortunadamente, las vacunas son sevorar-especificas (cepas bacterianas específicas) y por ello no ofrecen una protección general ya que hay más de 200 de serovars (tipos inmunológicos diferentes de bacterias). Algunas vacunas están disponibles para animales, pero éstas, al igual que las vacunas humanas, son solo efectivas en una pequeña variedad de serovars. Además, los efectos secundarios de la vacuna pueden causar inflamación dolorosa. La quimioprevención(el uso de medicamentos para prevenir la enfermedad) es posible bajo ciertas circunstancias. Algunas personas que han tenido un riesgo durante poco tiempo (por ejemplo, personal militar) pueden tomar doxiciclina (200mg/semana), empezando de uno a dos días antes de la exposición potencial para tener alrededor del 95% de oportunidad de prevenir la infección con quimioprevención. Este tratamiento preventivo no se recomienda para exposiciones duraderas.
Evitar el contacto con el excremento animal, una buena higiene, y evitar agua y suelos contaminados son otras formas de reducir la probabilidad de tener leptospirosis.
Los perros, y muchos otros animales, pueden infectarse de leptospirosis. Los veterinarios tienen acceso a vacunas que pueden proteger (o prevenir) la leptospirosis en perros y otros animales durante al menos 12 meses. Esta vacuna puede ayudar a proteger a los dueños de los animales y a otras personas o familiares de esta enfermedad durante aproximadamente un año.